martes, 18 de marzo de 2014

Dulce Francia

LOS DOS RENEGADOS

Dos renegamos de Dios
y de la Virgen María,
dos renegamos de España
por ir a la morería;
y como moros vivimos
y era dulce aquella vida
mejor que la que llevábamos
del Tercio en las compañías.

Recorríamos los montes
terciada la carabina,
él tocaba la guitarra
y yo esta canción decía:

—“Madre mía, la mi madre,
yo me fui a la morería
y enamoré a una morita
alta y muy bien parecida.

Eran de oro sus cabellos,
su carne de plata fina,
y su boca era una rosa
y siempre me sonreía.
¡Madre mía, la mi madre,
me quedo en la morería!”

¿Lo hizo Dios, o lo hizo el diablo?
nos cambiamos de cabila.
Allí muchos españoles
males sin cuento sufrían.

Y dije: — Compañerito,
¡qué dulce era nuestra vida,
pero, después de ver esto,
todo se me vuelve acíbar!—

Había, madre, un francés
(¿qué zorra le pariría?)
que siendo todos cristianos,
como a perros los hería.

El bienestar olvidamos
ante tan grandes desdichas;
nos hicimos sus amigos
esperando nuestro día;
la noche del Ramadán
le traje a la casa mía,
y cuando estuvo borracho,
muerta la luz que lucía,
le atravesé el corazón
con mi afilada cuchilla.

Madre, la mi madre,
¿por qué vine a esta cabila?
 
(Así fue contado en el campamento por unos cautivos evadidos.)
 
 
Dos legionarios se pasaron al moro, y como eran hombres de empuje y sin prejuicios religiosos, pronto llegaron a notables.
Casáronse y vivían una vida patriarcal. El diablo les llevó a una cabila cerca de Axdir. Allí empezó el calvario de su corazón. Vieron el constante martirio de sus hermanos españoles, y su falta de todo, menos de enfermedades y miserias, y se comían los hígados pensando a qué casta de canallas habíanse juntado.
Pero lo que más les sacó de quicio fue que un francés muy influyente en la república beniurriaguela era el más verdugo de todos.
— A este tío le vamos a arreglar —se dijeron.
E hiciéronse grandes amigos suyos.
El gabacho continuaba sus tropelías contra los cautivos: su mejor razón era el palo.
— Cochons! fils de moine! —tenía siempre en los labios.
 
 
Ramadán la engrandecida,
de las doce la novena,
¡secretos grandes de Alá,
que no fuese la primera!
Mohamad Ramadán.
 
La noche que termina el Ramadán es grande la algazara. Todo se vuelve comilonas y bailes; los chiquillos luchan a patadas en las calles, las casas se iluminan, y hasta, esta vez, un moro innovador se lanzó con un tango, interpretado al cornetín (probablemente uno del desastre), y después, el toque de diana, y el de rancho, y el de retreta; en fin, era un virtuoso, creo estuvo en Regulares. Otro, zanquilargo, marcóse un zapateado, con tales florituras que perdió las babuchas.
 
 
Nuestros hombres le habían convidado a cenar, y ¡me valga Dios!, tanto comió y bebió el gabacho que no cabía en los calzones.
Rompió a cantar con voix de tonerre:
 
Monsieur La Palisse est mort
mort devant Pavie,
un quart d'heure avant sa mort
il etait encore en vie…
 
Es bien en tales días [los del Ramadán] perdonar injurias y agravios, y pedir perdón a los que tuviérades injuriados y agraviados.
Don Içe Gebir
 
Cuando estuvo bien beato de ajenjo, uno apagó la lámpara, y el otro:
— ¡Toma, franchute, hijo de perra!… ¡Apalea ahora españoles!
Y con el puñal legionario le partió el corazón.
 
Luys Santa Marina
(tomado de su libro “Tras el águila del César”)
 

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Cristina se declaro "fan" de Napoleon Bonaparte.

"La presidenta Cristina Kirchner fue recibida ayer con honores en París, donde asistió a un desfile militar en homenaje a Napoleón Bonaparte, de quien se declaró “fan”, mientras que hoy tendrá una audiencia a “agenda abierta” con su par Francois Hollande, en la que podría abordarse la deuda con el Club de París."

http://www.cronista.com/economiapolitica/-Cristina-en-Paris-y-en-homenaje-a-Napoleon-20140319-0060.html

Anónimo dijo...

Cristina le dijo al presidente François Hollande que ella es cinéfila, tiene una hija... ¡cineasta! y admira a Truffaut, Godard y... ¡Vadim!

Fernando

Anónimo dijo...

Esta hetaira, se orina de gusto siempre que ve a un jerarca extranjero. Es un tilinga y una chirusa barata.

Alberto Fernandez.

Anónimo dijo...

Napoleón dijo "..la religión es un medio formidable para mantener quieto al pueblo.." o sea que nos engañan con la religión.